Microsoft y sus prácticas monopolistas en torno a Windows 8
En Octubre se lanzarán los primeros equipos con el Windows 8 ya incorporado, algo totalmente normal y que a primera vista no supone ningún problema, pero si seguimos indagando descubrimos las intenciones reales de la compañía.
Al parecer Microsoft ha estado “trabajando duro” para conseguir un método válido para evitar que el nuevo sistema operativo sea pirateado, de modo que lo que hace es crear un nuevo software UEFI para sustituir a las antiguas BIOS. Pero el problema que supone todo esto, es que los equipos que vengan de fábrica con esta modificación, no permitirán la instalación de otro sistema operativo que no sea Windows 8.
Lo más obvio y lógico es que cuando adquirimos un ordenador tenemos la libertad y el derecho de instalar en él lo que queramos, donde por supuesto se incluye el cambio de sistema operativo. Pero los ordenadores que se fabriquen con el Windows 8 ya incorporado significará que no podremos sustituirlo nunca por ningún otro, ni siquiera las versiones anteriores de Windows 7 o Windows Vista.
Tras conocerse la noticia ha habido un gran revuelo por la red, y al parecer desde Linux llevan tiempo preparándose ante esta situación creando versiones propias del software que controlará el arranque de los ordenadores. Al parecer en la próxima versión del núcleo de Linux podría soportar ya el UEFI.
¿Cambiará Microsoft de decisión o seguirá adelante? Todo parece indicar que Microsoft pretende monipolizar todos los ordenadores de la Unión Europea. Esto por supuesto atenta contra los derechos de los consumidores.